Estoy abajo muy abajo
en este reducto estanco de mis
quimeras
.atrás
vuelta hay no y
Subo a trompicones peldaño a peldaño
la ingente orografía de mis flaquezas
abandonos
dudas
miedos
heridas
lucha constante contra mis falsas
verdades
escondidas en la periferia de mi piel
enquistadas en mi córtex prefrontal.
Lucha contra mis límites internos
enfrentado a mi mismidad.
Empeño difuso y contingente
para salir al paso de puntillas
traspiés incluido
y ganar medias batallas de algodón.
Combates siempre amañados
donde las victorias se guardan en
cajitas de hojalata oxidada
y las derrotas alimentan el músculo
facial.
No hay pausa ni respiro
indefenso a mis noches de temblor
hostiado día a día en mi cara dura enmascarada
en mi cruz con fecha de caducidad.
Abro la ventana y aguardo la punzada
estilete de zafiros y corales
de tanto hidalgo corbata azul y brazo
en alto
nueva encarnación luciferina
tanta palabra ahogada en los desagües
tanto incendio ocultando el sol.
Ya no me deprime acabar de nuevo en la
lona
navego flotando por un
mar de perdedores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario