miércoles, 24 de junio de 2020

Ya es verano

YA ES VERANO, lo aseguran
quienes se han hartado
de pronosticar
auroras
tú mismo

¿cuándo podrás comenzar
a contar yoes en los demás?

en tus manos cargadas
de horas sin pausa
con boca de pez errante
has regalado infinidad de negros a
las flores de papel
trasplantadas
a tu jardín estival
donde el lirio intenta hacerse un hueco
entre soplos y lamentos

ya es hora el tórrido sol es testigo
de señalar criaturas
sin obsequios florales
crecer más altos
que nosotros mismos
sobrevolando oraciones
para observar al fondo
más allá de la espesura
                               más allá de las boyas flotantes
                        de las huellas del profeta
el blanco sepulcro de los masticados
                                                 sentimientos

sábado, 13 de junio de 2020

Kenema, Wuhan, yo

Kenema, Wuhan, yo
ayer, siempre.

Mar de muerte
sin rostro
con rostro:
¿dónde el hombre, la mujer, el anciano?


Ayer siempre lejano
abajo,
bajo la piedra
guijarros de vacilación
agujas implacables golpean
la puerta y
vician el aire.

¿Dónde el clamor?
Inmóvil - pudriéndose
olvidado - contagiado.
        
Hoy siempre cercano
aquí
con la mano del esfuerzo solidario y
bajo el lápiz del designio implacable:
ya ha vivido suficiente.

Basta.

¿Quién derrocha la cruda realidad
del silencio irresponsable
de la sandez hecha glosa?

No tengo mascarilla para
evitar la pandemia
de la indecencia.